En un hito para este proyecto, el Consejo Directivo de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) aprobó el giro de vigencias futuras por 1,5 billones de pesos que garantizan la entrega de los recursos que deben invertirse en el proyecto por parte de la entidad.
Por su parte Bogotá, a través de la Alcaldía y del Acueducto ya tienen garantizados 2,94 billones para complementar la inversión, que será de 4,5 billones de pesos. La gobernación de Cundinamarca aportará otros 61.000 millones.
La buena noticia es que disponer de los recursos permite iniciar los trámites para la licitación a fin de que la obra quede contratada. Esa planta tratará el 70 por ciento de las aguas residuales de Bogotá y el 100 por ciento de las de Soacha.
Será la planta de tratamiento de aguas residuales más grande de Colombia y estará entre las 12 más grandes del mundo, con una capacidad para tratar 16 metros cúbicos por segundo.
Es importantes recordarles a los bogotanos, que la ciudad desde el 2004 inició las grandes obras de infraestructura para descontaminar el río Bogotá. Hoy tiene construida una red troncal de túneles, paralelos a los ríos Fucha, Tunjuelo y Bogotá, por donde en los próximos meses circularán las aguas residuales.
Y cuando esté lista la planta, esas aguas llegarán por los túneles para ser tratadas y volver saneadas al río Bogotá.
Este es un paso gigante para salvar el río Bogotá.
Concejal
